LEMA DE MONTERREY El 12 de julio de 1989, el profesor y
licenciado Cruz Cantú Cantil, segundo regidor en sesión de Cabildo, propuso la
creación del LEMA DE LA CIUDAD DE MONTERREY. Aprobada la propuesta por el H.
Cabildo, el C. Lic. Sócrates Rizzo García, alcalde de la ciudad, dispuso que el
ponente se encargara de correr los trámites correspondientes para conformar la
convocatoria; y fue en la sesión de Cabildo del 16 de agosto de 1989, que se
tomó el acuerdo para que la Presidencia Municipal publicara la convocatoria
invitando a la ciudadanía regiomontana a participar en el certamen LEMA DE
MONTERREY.
Recibidas las propuestas por el H. Jurado Calificador,
fueron minuciosamente calificadas, ocupando para esto varios días, y fue el día
29 del mes de septiembre cuando dictaminó que el lema: "El trabajo templa el espíritu",
era el triunfador, basándose en los conceptos expresados por su autor Profr.
Samuel Rodriguez Hernández, y que a la letra dicen: El regiomontano está
orgulloso de su espíritu emprendedor y laborioso, que inquebrantablemente se ha
forjado como el acero de sus industrias. Se acrecienta a medida que vence las
adversidades, dando lo mejor de si mismo. Ese espíritu se ha templado con el
trabajo fecundo y creador, que fortalece el alma y hace de cada habitante de
esta gran Capital, un ciudadano responsable que construye cada día un Monterrey
cada vez más digno y mejor. "El trabajo templa el espíritu", sello
indiscutible de esta gran ciudad. La inscripción del LEMA se integró oficialmente
al escudo de armas de la ciudad. Monterrey, Nuevo León, noviembre de 1989.